El tiempo no dura nada
pero dura, duró y al parecer durará, todo el tiempo.

PD: Así como nada dura todo el tiempo, aunque la nada sí dura todo el tiempo. Al parecer el tiempo y la nada van juntos de la mano. Gracias, Sabato*.

*Edición de 2016:
Agradezco en éste texto a Sabato por su frase
«Todos somos nada, porque la nada siempre estuvo y nunca lo estará».