Te regalo mi unfollow, te lo ganaste,
Tú, spammer del coño, con tus mensajes pre-programados.
Te regalo mi unfollow, por tus comentarios idiotas,
por tus ideas nefastas, por compartir artículos
de @la_patilla, por ser chavista enclosetado.
Por tus opiniones clasistas, por tus respuestas
de señora del siglo XIV, por tus fotos de beisból,
por tu nada continuo, porque nunca tuiteas.
Te regalo mi unfollow, como último abrazo,
por tu actitud de imbécil, por ser tan regalada,
por tu traición, por tu egoísmo, por tu ineptitud.
Te regalo mi unfollow, por sentirte superior,
por creerte lo mejor, por desperdiciar mi presencia,
por no interactuar conmigo.
Te regalo mi unfollow, porque comprobé
que es mejor vivir sin consumir tu desastre.
Pensé que me arrancarías la naríz de un mordisco,
Minutos latentes de ira, Dalai, Buda, Cristo, los libros
mayúsculos y minúsculos voltajes de aire.
Como el judo y sin golpear a nadie.
Se transmite en ceremonias un poco más de violencia.
CONTRARRESTA
Alcance efímero de tímidas descargas,
vengo haciéndolo desde antes no me alteran tus entrañas
des per diciaste todo el potencial que tú tenías
ahora te sientes gordito y sale con fuerza tu ira
VEN GA – acá se recibe y como el judo
les propulso buena vibra y sentimiento super puro
Alcánzala que va muy lejos, le ha tocado el satélite.
¿Quiénes son las Élites?
CONTRARRESTA
Vamos…
Trató de pavimentar, pensando que existiría una calle.
Sobre el título de la avenida reposaba intacto, seleccionando los recuerdos a flote,
el punto recordó el cilindro nicotinoso dentro del bolso
y agradecí el poder de no querer tomar uno, ni hacerlo.
El cuento se desgarra en los mordiscos de un perro,
el sufrimiento es una absurda perdición,
el terror te salva a ti mismo de la incoherencia de lo que hablas.
Imagina eso, un sitio lleno de tácito rencor,
de latente incongruencia, total, todo depende de cómo reacciones,
de cómo te comportes, de lo que seas, pienses y hagas,
pero más aún de lo que haces con ese poder.
¿Cómo salvo yo al mundo de sí mismo?
Sempiezaporuno